Esta mínima vivienda goza con el atractivo de recibir luz natural a raudales desde el mismo cielo. Dividida en dos mitades, la zona de estar disfruta de la doble altura con una gran cristalera por techo, y la zona de servicios -cocina y baño- aprovecha la parte alta para un cumplido dormitorio que hasta tiene capacidad para una biblioteca.
Todo se muestra a la vista excepto el pequeño baño, y estéticamente, encontramos todo tipo de contrastes: desde las líneas sobrias de la cocina al marcado estilo oriental de la zona de comedor; desde el colorismo setentero del salón al recargado barroco de las obras de arte.
Cazado en marie claire Maison.
Cazado en marie claire Maison.
Increiblemente bien repartido, parece increible q haya gente capaz de hacer maravillas con tan poco espacio!
ResponderEliminarUn mezcla muy singular , con un resultado espectacular! Preciosa casa! bss Cristina
ResponderEliminarMuebleando otra vez
La palabra que has utilizado, "contraste" define perfectamete esa decoración. El contraste genera una reaccion en el observador, pero a veces al precio de perdez calidez o armonia.
ResponderEliminarLa luz zenital es otro de mis sueños, sueño con una casita integrada en la anturaleza, con los pasillos cubiertos de cristaleras, con las habitaciones abiertas al cielo diurno o nocturno, para poder ver pasar la nubes, pero sin afan de contarlas o para ver el cosmos a vista de homo sapiens.
Me encanta la doble altura con la biblioteca. Genial!
ResponderEliminarUn abrazo
El buen uso de la luz, sea natural o artificial, hace diferencia en la decoración. Es sin duda un recurso para no olvidar.
ResponderEliminarBeso!
Me ha encantado el sitio en el que han ubicado la cama.
ResponderEliminarSaludos y buen día