Ayer, a las 2 de la tarde, gracias a un par de amigas, estuve en... la mascletà. Pero no una mascletà cualquiera, no, en un sitio muy privilegiado, desde la undécima planta de un edificio recayente a la mismísima plaza del Ayuntamiento, ya podéis ver cómo se veía el espectáculo.
Para quien no lo sepa, la mascletà es uno de los más populares espectáculos de las fallas, nuestras fiestas autóctonas. Consiste en unos fuegos artificiales en los que predomina el ruido, disparado con cierto orden y ritmo. Durante los primeros 19 días de marzo, la gente se congrega en la plaza para, en apenas unos minutos, quemar unos 150 kilos de pólvora.
En estas imágenes se pueden ver los preparativos y los momentos previos. Las ristras de petardos listos para estallar, la distancia de seguridad alrededor de la zona de fuegos, las fuerzas de asistencia y seguridad -policía, ambulancias, bomberos- por si ocurre algún accidente, el balcón presidencial lleno de autoridades e invitados VIP, las Falleras Mayores y su Corte de Honor... todo un ritual que se repite día tras día.
A nuestra derecha teníamos la Falla de la Plaza del Ayuntamiento, aún montándose con tres grandes grúas. A pesar de las últimas lluvias, todas las fallas debían estar completamente terminadas ayer a medianoche, así que los operarios iban trabajando a marchas forzadas.
Y aquí os dejo con el vídeo de la mascletà, no es de muy buena calidad, pero era una oportunidad única para grabar el evento. Ya sabéis, para oírlo hay que poner los altavoces a tope, y aún así nunca sonará tan fuerte como allí en directo.
Aquí, ya, una vez terminada la disparà, la gente se va diseminando para irse a comer una buenísima paella, por ejemplo. En una hora no hay ni rastro de la gente ni de las vallas de retención y señalización, el tráfico vuelve a su sitio y 24 horas más tarde estamos disfrutando de una nueva mascletá, seguramente más fuerte que la de ayer.
Es algo espectacular, una experiencia digna de vivirse en directo. Animaos!!
Madre mía el miedo que me dan a mi los petardos y cohetes....................
ResponderEliminarYa lo creo, son unas fiestas divertidas y originales. Las fallas preciosas, y todo el mundo sale a la calle a pasarlo bien. Valencia se llena de colores y sonidos. Merece la pena visitarlo aunque sólo sea una vez. Recomieno como mínimo presenciar una mascletá, disfrutar del castillo de fuegos artificiales la víspera de San José, contemplar como queda la plaza llena de flores tras la ofrenda y sobre todo ver las calles ganadoras por su iluminación, es una pasada, preciosas. Y como no visitar sin perder detalle las fallas más importantes. Besos y felices fiestas a todos.
ResponderEliminarQué suerte, vaya vistas!
ResponderEliminarEstas fiestas son una pasada, doy fe, pero este año paso que van a ser multitudinarias.
Pasadlo bien.
Vaya, gracias por compartirlo... nunca lo había 'vivido' así.
ResponderEliminarGracias!!
Muchos besos ;)
Nunca entenderé lo de los petardos,jjajajaja
ResponderEliminarSi es por mi no tendrían sentido, pero entiendo la importancia para los valencianos, cada uno tiene sus costumbres y tradiciones,y hay que respetarlas.
Además, lo mejor de todo son las fiestas,jajaja
besis
clara
Nieves lo ha resumido muy bien.
ResponderEliminarClara, somos muy ruidosos, yo llevo todo el día rodeada de ruido, bandas de música, gente... y ni me inmuto (es dificil si tienes que hablar por teléfono u oir la tv, la verdad, jajaja). A las 8 de la mañana suena una despertá y yo sigo durmiendo. Afortunadamente no tengo cerca ninguna verbena, eso sí que es un martirio.
Wow, qué impresión, cuánta gente!!!! Suena tan divertido, estaría bueno vivirlo en vivo, como dices!
ResponderEliminarUna pasada. Ya sabes Fati, si tienes otra oportunidad como esa, me llamas. No todo el mundo puede disfrutar de esas vistas y ese sonido.
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